Una poesía al despertar
Y otra poesía al acostarte
Una que te hable de amor
La otra te esté evitando,
Para venir o te vayas
Te quedes en mi vida, pases
Me hicieras más bien que mal
Fueses sin doblez entero
Profunda verdad, sutil mentira
Ausencia de mi presente.
(…)
Amor
La Pletórica repitiéndose.
Ella vino a mí.
En forma de elefante.
De tremenda envergadura, exultante de abundancia.
Retumbar de pasos.
Su olor brisa de la tarde.
A mí, distinguida del resto.
Cálido su ser, fuego excavado en la roca.
Ruido de estrellas, brillante amanecer.
Eterna.
A deslumbrarme…
(…)
Espirales
En un espacio infinito
Un tiempo cero
Suave contra ti
Somos dos espirales
Dos fuerzas opuestas
Vibrando al rumor
De una música celeste
Conteniendo el universo
Mecidos de brisa eterna
Vacíos de plenitud
Llenos de nada…
(…)
Dibujando…
Te dibuja un niño
Nace de su mano
La forma de tu cuerpo
Líneas coherentes
Le sirvan de ejemplo,
A su trazo infantil
Desde su corazón
Traducido en afectos
Te reconozco…
Y aún eres más
Sutil discurso al aire
que vuela y se posa
Instante a lápiz
Constata tu ser…
(…)
No fuimos poetas…
No fuimos poetas
No nosotros
Por más te escriba
Me escribieras tú…
No éramos poetas
Líricos griegos
Pensando el Amor…
(…)
Mas allá de mí
Te miraba a ti para mirarme
Me veía a través de ti
Y eras tú yo
Mi otro espejo.
Era yo viva en ti
Mi tiempo el tuyo
De arena que cae
Finita deslizándose
Amontonándose,
El tuyo nuestro…
(…)
8 de Marzo del 21
Por fin un año en que el día de la mujer pudiera ser un tiempo, un espacio, para la reflexión, rescatarlo de la costumbre y consistiera necesariamente en algo más que ir de manifestación, reproducir hasta la saciedad, a mí al menos ya me cansa, me aburre soberanamente, las formas de las mujeres antes que nosotras, mucho antes, tanto que algunos no se acuerdan o quieren olvidarse cómo era y honrándolas en la memoria concederles el mérito, agradecerles, cuando solo ocupar la mujer el espacio público, invadirlo, marchar las calles de una ciudad en tropel, todas a una, las más atrevidas, valientes en representación, tenía un sentido y ese hecho era en sí mismo claramente la alteración, la subversión del orden establecido y daba escalofríos verlas pasar, andar juntas…
(…)
De la serie lenguaje y ganas
Habría selección sexual y no sería por el lenguaje sin embargo a mí me llegarías por la voz, la primera vez que te escuchara directamente dirigirte a mí si tuvieras algo que decirme y no solo eso, que fuera importante, valioso. Sin estar todo ganado me entrarías, se orientarían tus pasos, empezaría el camino juntos. Y el sonido…
(…)
Confesiones III
El otro día fallecía un señor en su casa al incendiarse la cantidad de cosas que acumulaba. Una muerte típica de diógenes,(¿por qué será?, ¿quizá catarsis?; polvo somos y en polvo nos convertiremos, cenizas), ¡pobre hombre! Y enseguida pensé que a mí eso no me pasará. O puede que sí indiscutible a estas alturas que los extremos se atraen, se tocan y se puede ser capaz de algo y su contrario, de la pasión al odio, que más que principio y final hay un continuo, un defecto puede convertirse en virtud y a la inversa. Pero en fin, que me enrollo y en ese momento lo que verdaderamente pensé, irreflexiva, refleja y relajadamente tomando un vino y alentada por mis hermanas que me conocen bien, es que yo no podría ser diógenes…
(…)